miércoles, 11 de mayo de 2011

1632 gramos de vida

Hoy recuerdo y comparo, sí otra vez echo la vista atrás para darme cuenta de cuán afortunada soy.

Hace un año, me preguntaba cuándo llegaría el momento de irnos a casa, cuándo mi niña llegaría a los 2000gr, sí me la llevaría antes, si surgirían complicaciones y podríamos afrontarlas de la forma más correcta.

Ahora sé que mi impaciencia me hacía vivir al límite, pero no por ello disfrutar al máximo de mi pequeña. Hace un año, mi niña pesaba 1632 gramos y el lunes 10 de mayo nos daban LA SEGUNDA MEJOR NOTICIA pasaba de Cuidados intermedios a Neonatología, seguiría en la incubadora pero la sonda nasogástrica iba pasando a la historia, por fin podíamos darle de comer a la pequeñaja y aprender a ser más papás.

Los primeros bibes fueron un drama cómico, pero poco a poco nos fuimos acostumbrando y Ariadna nos echaba una manos para no sentirnos tan fracasados, porque si ya antes, los por qués nos traían de cabeza, ahora se sumaba el no saber si lo haríamos bien en un futuro era nuestro día a día, el camino hacía el hospital se hacía duro, muy duro, no saber si tu bebé estaría bien, si había tenido complicaciones y no nos habían localizado, eso me mataba por dentro, pero nunca lo comentaba con nadie, craso error que pagué unos meses más tarde. El corazón palpitaba fuerte, parecía salir por la boca y según me acercaba a la unidad neonatal, era más contundente, creí que me mis latidos se pudieran escuchar al igual que mis pasos hasta su cunita, pero entonces cruzaba la puerta, me ponía la bata casi como un acto reflejo, me lavaba las manos y ahí que aligeraba el paso hasta llegar frente a ella, entonces y sólo entonces el tiempo se paralizaba sólo para nosotras.

No hay comentarios:

LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...